Getafe ha rendido hoy un homenaje a Miguel Ángel Blanco, en el XX aniversario de su asesinato. Los vecinos y vecinas de Getafe han podido así honrar su memoria en la calle que lleva su nombre. En el acto, organizado por el Ayuntamiento, la alcaldesa Sara Hernandez destacó que el secuestro y vil asesinato de Miguel Ángel Blanco nos unió para hacernos más libres a todos los que conformamos la sociedad española.

En su intervención Sara Hernández recordó que el “movimiento cívico y espontáneo tras su secuestro y posterior asesinato, denominado espíritu de Ermua, supuso un punto de inflexión en la percepción que la sociedad española tenía de la actitud de la sociedad vasca ante ETA. Nació una nueva conciencia ante el terrorismo que sentó las bases de la mejor y más eficaz política antiterrorista: la que defiende que tiene que haber vencedores: las víctimas, la sociedad democrática y el Estado de Derecho y tiene que haber vencidos: los terroristas y sus cómplices”.

En el acto han estado presentes representantes de todos los grupos municipales que han depositado claveles blancos bajo la placa que lleva el nombre de la calle.

En aquellas aciagas 48 horas del secuestro y asesinato del concejal de Ermua Miguel Ángel Blanco, Getafe mostró su repulsa por el vil chantaje y expresó su solidaridad con la familia y con todas las víctimas del terrorismo. Las fiestas del barrio de Perales del Río se quedaron sin música, los vecinos y vecinas organizaron una vigilia perpetua que iluminaron la plaza de la Constitución mientras se sucedían las concentraciones silenciosas. El lunes 14 de julio se celebró un Pleno Extraordinario y urgente en el que se aprobó por unanimidad una Declaración Institucional en la que se hacía un “llamamiento a la población para que encaucemos pacíficamente nuestra rabia, nuestro dolor y legítima indignación demostrándoles a estos asesinos de la libertad nuestra firmeza y nuestra fortaleza”.

Ese mismo año, el 15 de diciembre, el Pleno en sesión extraordinaria aprobó por unanimidad dar el nombre de Miguel Ángel Blanco a una de las nuevas calles céntricas de Getafe situada entre las calles Toledo y Paular y un año después de su asesinato, el 12 de julio de 1998, acogió el primer acto de homenaje de Getafe en su memoria.