Antes de comenzar la División de Honor Plata femenina, el entrenador de Getasur, Pedro Moreno, advirtió del déficit de preparación con el que su equipo llegaba a la competición, dado lo adelantado del calendario y el tardío final del circuito de balonmano playa. Sin embargo, en las dos primeras jornadas, y a pesar de haber cosechado sendas derrotas, las azules ya han demostrado que son capaces de mirar a los ojos a los principales candidatos a finalizar el curso en la zona noble de la clasificación.

El pasado fin de semana, las getafenses cayeron por un solo gol (22-23) ante Adesal Córdoba, que finalizó la temporada pasada en la primera posición del Grupo D con un amplio margen sobre el segundo y que este año se perfila como uno de los más firmes candidatos al ascenso a la Liga Guerreras Iberdrola. De hecho, la primera mitad del partido disputado en La Alhóndiga tuvo un claro color local, con las madrileñas llegando a ponerse incluso ocho goles por delante gracias a un juego acertado en todas las facetas. Las de Moreno firmaron 30 minutos para enmarcar, con una efectividad ofensiva notable y una solidez en el campo propio que asfixió a las jugadoras cordobesas. Así, se llegaba al descanso con 14-8.

La reacción, sin embargo, no se hizo esperar. El arranque de la segunda mitad por parte de las visitantes dejó claro que no iban a permitir que se les escapasen los puntos así como así y, poco a poco, fueron recortando distancias para llegar al último cuarto de partido con el marcador empatado, basándose especialmente en una dureza defensiva que las locales no conseguían superar. Getasur, por su parte, empezaba a notar la falta de recorrido en esta fase de la temporada y no conseguía mantener los porcentajes de acierto de la primera mitad. Así, se llegaba al final del encuentro con una ventaja mínima para las visitantes, que se llevaban los dos puntos rumbo al sur.

Este domingo 24, las getafenses tendrán una nueva oportunidad de mostrar a su afición el progreso de su trabajo y recibirán a las 12 horas a Roquetas, actual séptimo clasificado tras sumar una derrota a domicilio frente a Fuengirola Un Sol de Ciudad (24-20) y una victoria en casa contra Soliss Pozuelo (29-24). La responsabilidad ofensiva de las almerienses recae sobre Isabel Ibáñez, que con solo 28 años es la jugadora más veterana del equipo y que acumula 12 goles en las dos primeras jornadas, que la sitúan como la séptima máxima anotadora del Grupo D. Recién ascendido desde la Primera Estatal, el equipo de Roquetas de Mar busca sumar puntos en este arranque liguero para asentarse con buen pie en la categoría.